¿Puede una trabajadora con dolores de cabeza constantes y problemas de concentración ser declarada en incapacidad permanente absoluta?
Sentencia de Tribunal Superior de Justicia de Castilla-León del 24/07/2024 en materia de OTRAS CUESTIONES
Resumen
El TSJ de Castilla y León considera que impiden el desempeño adecuado de su profesión habitual y cualquier otra actividad laboral, es justificable la declaración de incapacidad permanente absoluta.
Supuesto de hecho
- La trabajadora, nacida en 1965, trabaja como diseñadora gráfica y multimedia.
- Estuvo en IT desde el 19 de agosto de 2021, debido a una recaída de incapacidades previas, por lo que inició un expediente de incapacidad permanente derivada de enfermedad común.
- El 16 de diciembre de 2022, la Entidad Gestora denegó la prestación y extinguió los efectos económicos de la incapacidad temporal (IT).
- Según los informes sufre cefalea crónica postcovid de perfil tensional sin respuesta terapéutica, trastorno adaptativo mixto reactivo, problemas de artrosis en manos y rodilla, omalgia derecha, astenia y déficits atencionales
- Además, se determina que tiene dificultad para actividades de alta responsabilidad, concentración y esfuerzo físico debido a la cefalea crónica y otros problemas de salud postcovid.
- La trabajadora, al considerar que debía declararse la incapacidad permanente, presenta demanda ante los tribunales.
Consideraciones jurídicas
- La cuestión objeto de litigio en este caso es la determinación de si la demandante debe ser reconocida con una incapacidad permanente absoluta debido a las secuelas del COVID-19 que sufre, que incluyen cefaleas crónicas, trastorno adaptativo mixto, y déficit cognitivo.
- En primer lugar, la trabajadora sufre de cefalea crónica postcovid, trastorno adaptativo y déficit cognitivo, presenta limitaciones graves para realizar tareas que requieren atención, concentración y manejo de pantallas,
- Razona la sentencia que esto es incompatible con su profesión de diseñadora gráfica y multimedia.
- Además, se afirmó que las cefaleas diarias y refractarias a tratamientos dificultan su capacidad para ejercer cualquier profesión de manera adecuada y sin sufrir malestar constante.
- Argumenta la sentencia que la gravedad de las dolencias impide a la trabajadora realizar su actividad profesional habitual, y también afectaría negativamente su desempeño en otras profesiones.
- Por lo tanto, el tribunal declara la incapacidad permanente absoluta de la trabajadora.
Conclusión Lexa
El TSJ de Castilla y León otorga a la demandante la incapacidad permanente absoluta, ya que las limitaciones físicas y cognitivas derivadas de su cuadro clínico le impiden realizar no solo su trabajo habitual, sino cualquier otra profesión de manera eficiente y sin un sufrimiento continuo, lo cual valida la concesión de la incapacidad absoluta.